If the child is not learning the way you are teaching, then you must teach in the way the child learns Rita Dunn

viernes, 29 de octubre de 2010

Aprender un segundo idioma mejora la "plasticidad cerebral"

Sociedad

Altera en sentido positivo el área cerebral que procesa la información. 

 INVESTIGACION DEL UNIVERSITY COLLEGE DE LONDRES

Por:  LA VANGUARDIA ESPECIAL

Científicos del University College de Londres han detectado, tras examinar a 105 personas, de las que 80 eran bilingües, que el conocer un segundo idioma altera en sentido positivo la estructura del cerebro, en concreto el área que procesa información. En particular, mejora la llamada plasticidad cerebral. Un poco como un ejercicio deportivo ayuda a potenciar los músculos. En efecto, el análisis con el escáner ha demostrado que la materia gris situada en la parte inferior de la corteza parietal era más densa entre los que hablaban una segunda lengua, sobre todo entre los que aprendieron el idioma desde pequeños.

El profesor de Psiquiatría de la Universidad de California en Los Angeles, Joaquín Fuster, que habla fluidamente seis idiomas, cree que si se quiere potenciar la memoria, es recomendable abandonar el cómodo monolingüismo ya que "con un segundo idioma se mejoran todas las funciones cognitivas, la atención, la percepción, la memoria, la inteligencia y el lenguaje".

Al ponerse en marcha gran parte de la maquinaria cerebral, se producen, de forma indirecta, efectos muy positivos en otras áreas. Así, "los niños bilingües destacan por tener una mejor capacidad de selección de las respuestas, una mayor habilidad para llevar a cabo tareas simultáneas, gracias a que consiguen evitar interferencias y controlar el comportamiento", dice Rodríguez Fornells.

Albert Costa, profesor universitario y miembro del grupo de Neurociencia Cognitiva del Parc Científic de Barcelona, recuerda que "las personas que hablan dos lenguas tienen una mayor facilidad para focalizar su atención en aquello que consideran importante y prescindir de las informaciones que puedan interferir".

Sin embargo, hay que introducir algunos matices. Uno es el número de idiomas. Conocer diez lenguas no nos convertiría en genios de forma automática. Es más, con dos bastaría. La psicóloga Ellen Bialystok de la Universidad de York, en Canadá, reconoce que al hablar un idioma extranjero se registra una mejor calidad de la atención para problemas complejos. Sin embargo -apunta-, no hace falta convertirse en políglota para que nuestro cerebro mejore la plasticidad. "A partir del segundo idioma que se aprende, no se registran ulteriores beneficios en el cerebro".

La enseñanza de inglés o el secreto encanto de confundir al que aprende.








Ya no se trata de métodos o sistemas, eso quedó en el pasado pisado, o en el simple past, como prefieran llamarlo. Apelemos solamente al sentido común e intentemos hacer un análisis de los diversos e increíbles modos en que se "enseña" inglés. Y ya nos encontramos con el primer problema:
¿Se puede enseñar un idioma? ¿Puede un profesor con los conocimientos de la lengua transmitir el idioma como se pensaba tradicionalmente? ¿Se trata sólo de un buen método?
Las nuevas corrientes pedagógicas fundamentadas en respetadas investigaciones de orden nacional e internacional nos indican que el aprendizaje de una lengua es un creativo proceso de construcción en el que los saberes previos y la exposición al idioma completo, real y natural juegan un papel central.
Que quiere decir "exposición al idioma completo, real y natural"
Significa que al ver el cuadro completo, el que aprende va construyendo creativamente el idioma basándose en hipótesis sobre su funcionalidad y aplicación con la adecuada intervención de un docente que entiende este mismísimo proceso. Al igual que en el armado de un rompecabezas, apoyándose en saberes previos y en la visión completa del objetivo a lograr el que aprende llega a destino.
La siguiente pregunta sería que ocurre cuando no se muestra ni expone el idioma en forma natural y completa?
Este es el caso de la mayoría de los programas de colegios primarios y secundarios donde se desarrollan cursos centrados exclusivamente en el uso de la gramática fuera de contexto. Estos programas se basan precisamente en la teoría opuesta a la que se menciona arriba: o sea, se desarma bien el idioma, se lo aprende en pedazos lógicos, se entrega todo procesado al alumno así no tiene que construir sus propias hipótesis, sin dejarlo disfrutar del hermoso y creativo proceso de aprender. Esto es muy fácil de corroborar al ver los libros de texto que estos colegios utilizan donde los temas, diálogos e historias que se tratan son artificialmente armados para responder a la aplicación de una determinada estructura gramatical. Se habla en presente hasta que un día aparece el pasado y así sucesivamente se van agregando los ingredientes ya procesados por otro y no por el interesado.
Resultado: el alumno aprende gramática, pasa exámenes internacionales escritos, hace complejos ejercicios de verbos etc., etc., pero apenas puede hablar el idioma y en muchos casos su frustración acaba por desanimarlo.
Lamentablemente, durante muchos años, con el afán de simplificar la enseñanza del idioma se ha terminado confundiendo al que aprende al obligarlo a transitar un camino mucho más difícil y entramado que el natural y lógico. Para graficarlo mejor sería como si en nuestro propio idioma nos fueran enseñando en trozos, hablándonos siempre en un mismo tiempo de verbo y con la intencionalidad de que aprendamos las partes en vez de dejarnos escuchar el idioma tal cual es, equivocarnos al expresarnos y eventualmente comenzar a comunicarnos correctamente.
Esto por supuesto, no significa exponer al alumno del primer nivel a escuchar a la CNN o a mirar una película sin herramienta alguna. Esto también generaría un alto nivel de frustración. ¿Entonces como?
Se trata de crear situaciones de aprendizaje contextualizadas que tengan sentido y propósito para el alumno. La literatura se convierte así en el vehículo ideal para la aplicación de proyectos y unidades didácticas coherentes y conectadas con la vida real del alumno. Dichos proyectos guiados por las propias inquietudes de los alumnos que a su vez generan conflictos y discusiones de interés y nuevas preguntas, se convierten en interesantes herramientas para el aprendizaje. Se apela pues, a la utilización de estrategias de razonamiento sofisticadas donde el alumno debe pensar, resolver problemas, y desarrollar su capacidad intelectual que lo llevan más allá del aprendizaje del idioma. Se trata de aprender el idioma, aprender a cerca del idioma y aprender a través del idioma. Quizá suene demasiado ambicioso para algunos. Es obviamente más simple dar una clase pensando (aunque la evidencia en contra sea devastadora) que se aprende por transmisión, que todos aprenden al mismo tiempo y del mismo modo, y que una vez que se aprende la gramática se tienen todos los ingredientes para cocinar la torta. Es precisamente cuando existe una incógnita o problema a resolver, cuando no entendemos y nos faltan ingredientes que se constituye el gran desafío del pensamiento creativo. Quizá ya sea hora de dejar de temer y subestimar la increíble capacidad intelectual humana de construir conocimientos y adquirir destrezas.

Lic.Marta Braylan
Psicóloga Educacional-Asesora Pedagógica de Inglés.

Pa' que en Inglés?

Recuerdo que........ algún tiempo atrás, cuando una colega necesitó un salón para llevar a cabo una obra de teatro en Inglés, tuvo que reunirse con el funcionario municipal a cargo del teatro para solicitarle el permiso correspondiente. Luego de explicarle los motivos y el interés para llevar adelante este evento, nunca hubiera imaginado que recibiría una pregunta como respuesta, y qué pregunta?

Algunas razones.
Las razones por las cuales el idioma Inglés se ha vuelto cada vez más necesario y casi un “commodity” dentro del bagaje actual de conocimientos que nuestros contemporáneos deben disponer son muy variadas como diferentes, pero todos tenemos muy en claro una cosa, sin el Inglés, nuestro horizonte es cada vez más limitado.
Hoy en día y más que en otros momentos, el manejo de la información a través de Internet o de bibliografías nos permite contar con alguna ventaja competitiva respecto de aquellos que se encuentran limitados por el no uso del idioma y a la espera de textos traducidos.
Sabemos de la necesidad de comunicarnos adecuadamente con personas de otras nacionalidades para entablar relaciones comerciales o de intercambio y que en esta aldea global, el único idioma reconocido por todos es el Inglés.
Disfrutar de una buena película, sin la distracción que genera leer los subtítulos, cantar nuestras canciones favoritas y saber lo que estamos diciendo es algo que nos lleva a obtener una mayor satisfacción y deleite.
Pa’ qué en Inglés? ... puede sonar hasta risueño pero debe ser una pregunta y no una respuesta.
Las respuestas son muy claras y concretas, depende de cada uno de nosotros.
Si lo que pretendemos es seguir aumentando las brechas ya existentes sólo respondamos con un Pa’ qué en Inglés?
Si lo que buscamos es construir un futuro más acorde a nuestros deseos y aprovechar al máximo las nuevas oportunidades que se nos presenten, hagámonos la pregunta para qué en Inglés ? y respondámosla adecuadamente.

Cuando, Cómo y Dónde comenzar?

“No dejemos para mañana lo que podamos hacer hoy” reza un dicho popular.
Cuanto antes tomemos la decisión de comenzar a aprender Inglés o motivar a nuestros chicos a que lo hagan, empezaremos a descubrir una nueva dimensión de posibilidades y estaremos preparados para afrontar los nuevos desafíos con todo coraje y optimismo.
Ante la abundante oferta de institutos, cursos y sistemas de aprendizaje que no siempre son todo lo clara que deberían, y para responder correctamente a estas preguntas, deberíamos tener en cuenta algunas pautas:
El Método de Enseñanza: debe ser comunicativo, haciendo que el alumno hable inglés desde el primer momento en el marco de una situación de vida real.
Grupos Reducidos: es de suma importancia que la cantidad de alumnos no supere los 8 a 10, de modo que todos tengan las mismas oportunidades de intercambio durante las clases.
El Nivel: las clases se deben conformar con alumnos del mismo nivel y edad para que todos tengan intereses compartidos y experiencias de vida similares ya que se encuentran en igual fase evolutiva.
Los Docentes: todo lo anterior cae en saco roto si el nivel de los docentes no es el adecuado. Esto significa que realmente sean docentes, graduados de Institutos Superiores o Universidades. Puesto que solamente ellos tienen las herramientas pedagógicas necesarias y las condiciones para transmitir sus conocimientos de un modo que se adecue al alumno, a sus intereses y necesidades.
Acceso a Títulos y Certificados: esto responde básicamente al respaldo que podemos obtener para hacer frente a una oferta laboral o de estudios en el exterior. Para ello se dispone de
Exámenes Nacionales e Internacionales a los cuales se acceden a través de Convenios y Acuerdos que cada Instituto posee con las casas matrices.

Algo más?
Cuando busquemos otros elementos, además de los ya nombrados, para tomar una decisión adecuada a nuestros intereses deberíamos evaluar lo siguiente:
La relación entre Precio y Valor que pretendemos.
 La importancia de disponer de un ambiente confortable y diseñado para cumplir con sus propósitos.
El  Reconocimiento continuo por los avances obtenidos.
La Profesionalidad del cuerpo docente en el seguimiento de las metas pautadas.
La Disponibilidad de ámbitos de discusión y esparcimiento.
La Trayectoria del Instituto con relación a la Satisfacción lograda por los alumnos que han pasado por él.
La Comunicación periódica entre docentes y padres para una asistencia permanente a los alumnos.

Y ahora?
La decisión está en sus manos; esperamos que parte de lo expuesto haya sido lo suficientemente claro como para que muchas de sus dudas encuentren la mejor respuesta.
Recuerde que siempre el momento oportuno es ahora !!





Silvina Blas. Profesora Nacional de Inglés.
Directora del London Bridge Institute.
Uruguay 328 e/Dorrego y Pagano.
B1744 AJH. Moreno
lbinfo.moreno@gmail.com
Tel: 0237-462-1387
Nota publicada en la Revista Country – Septiembre/2001

Cada vez que alguien toca el timbre.





Cada vez que alguien toca el timbre, es una oportunidad de entendernos y proyectar un futuro prometedor.  Cada vez que alguien abre esa puerta es un desafío para London Bridge, el desafío de buscar la mejor manera de darte lo que estás buscando. Cada vez que alguien nos reconoce por la tarea desarrollada es el momento que decimos  Misión Cumplida.